1.

El silencio le demuestra al corazón un escenario en donde el color abraza con la familiaridad del agua.

Adentro hay espacios bien tajados, hay velocidades innombrables reencontrándose con el espesor de la sombra, hay un descanso impulsado desde el límite. Afuera, un abuso de vacíos entrechocándose dando lugar a que la orientación que brinda una raíz sufra pérdidas, el vértigo que se disfraza de un ruido del que hay que acostumbrarse.


2.


Al animal lo obligan a estar desnudo, entonces sobrevive hurgando en lo que hay detrás de los ojos.

Cantando, le quita a la noche la fragilidad de la ilusión, acomoda lo que vibra a su altura, como recogiendo pedazos de claves que fueron fomentadas al principio del infinito.

La justificación de cada crecimiento. El plano mudo del alma conciente. Los secretos del blanco y el negro.



3.


Cada vez que su voz más intima se arroja al acecho, hay criaturas de otras profundidades que responden poniéndose al descubierto.


4.


El vacío que vacía, que no es muerte ni vida, que es mentira reforzada con idioma de camino, acecha al deletreador de sueños, pero él, por aún no animarse a darse un nombre, tiene la oportunidad de colgarse de lo que dicen las estrellas.


5.


Suave, muy suave.

Es el corazón que se acerca y toca.

Es el mundo que desaparece.


No hay comentarios: